EL INSULTO COMO ACTO DE HABLA EXPRESIVO الشتائم بوصفها فعل كلام تعبيريّ - الجزء الثاني والأخير INSULT AS AN ACT OF EXPRESSIVE SPEECH - <center> Fénix Traducción فينيق ترجمة Phoenix Translation </center> Fénix Traducción فينيق ترجمة Phoenix Translation : EL INSULTO COMO ACTO DE HABLA EXPRESIVO الشتائم بوصفها فعل كلام تعبيريّ - الجزء الثاني والأخير INSULT AS AN ACT OF EXPRESSIVE SPEECH

2017-11-27

EL INSULTO COMO ACTO DE HABLA EXPRESIVO الشتائم بوصفها فعل كلام تعبيريّ - الجزء الثاني والأخير INSULT AS AN ACT OF EXPRESSIVE SPEECH

Intentos de “antología” del improperio cristalizados en algunos volúmenes demuestran una vez más que la lingüística se ha ocupado limitadamente de algunos fenómenos de las lenguas. El enfoque pseudolexicográfico de algunos libros, y  el afán no mucho  más que lúdrico de coquetear con los tabúes –lo que no deja de ser legítimo, cuando es sincero --, son la señal de que poco trabajo oficioso ha tenido lugar. Alguien debe haber olvidado que insultar es “ Ofender a uno provocándolo e irritándolo con palabras o acciones” (Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, 1970) (el subrayado es nuestro), o que el insulto verbal, tal vez el insulto por excelencia, no es menos acto de habla que otros actos de habla, y sí es particularmente interesante, dada su condición de transgresor de “lo correcto” y violador de muchas máximas.

El insulto es también uno de esos actos que expresan “ un estado psicológico del hablante, causado por un cambio en el mundo que le atañe al interlocutor o a él mismo”(Haverkate, 1993), en este caso, de un estado psicológico negativo. Al igual que la disculpa, está causado por un estado de cosas negativo, solo que el afectado  es el hablante. Este estado de cosas es causado intencionalmente o no por el interlocutor --o, lo que es lo mismo, el que resultará insultado—tal como sucede en caso del cumplido. En otras palabras, en una situación previa lingüística o no, alguien es considerado (justa o injustamente) causante activo o pasivo de un estado de cosas desfavorable para alguien que, por su parte, tratará de restablecer el equilibrio al convertirse en “insultador”. De este modo el hablante no solo podrá expresar de algún modo su subjetividad (algo conocido como “desahogarse”), sino además causará en el interlocutor semejante irritación.
El complejo “arte de injuriar” genera insultos de diferentes naturalezas. Algunos, tal como vimos que ocurre con muchos saludos, funcionan más en términos de valor y no de significación, pues aún siendo altamente efectivos como ofensa, no nos remiten a un estado de cosas posible en la realidad ni ofrecen descripción alguna del mundo extralinguístico. En cambio, otros poseen un contenido proposicional tan concreto que pueden ser confundidos con valoraciones negativas de gran intensidad (lo mismo que el cumplido tiende a ser confundido con la valoración positiva). Nótese, sin embargo, que en el insulto tiene que haber una dosis de falsedad o, al menos, de hiperbolización, puesto que, dado un axioma de la sabiduría popular, “la verdad, no ofende”. Luego, este tipo de insulto, acto expresivo de apariencia valorativa, debe romper la máxima de calidad.
El insulto siempre rompe la máxima de manera. Dado el caso de que hay personas más propensas a insultar que otras, en cualquier contexto, justa e injustamente, y que hay actitudes que propician insultos casi justificables, la máxima de relevancia en el insulto se cumple unas veces, y otras, no. Huelga decir que el insulto siempre rompe las máximas comprendidas en el principio de cortesía (generosidad, aprobación, modestia, acuerdo y solidaridad), con excepción de la máxima fática, Un insulto puede tener actos perlocutivos de varias naturalezas. Tal vez los más comunes sean las respuestas no verbales (como las bofetadas), las reprobaciones (como cuando la víctima manifiesta que su interlocutor está obrando con injusticia, está cometiendo un atrevimiento, o lo está ofendiendo), las amenazas con posteriores acciones verbales o no verbales, y la devolución del agravio, es decir, otro insulto.
En el caso de las respuestas verbales injuriosas, vemos que en ocasiones crean pares de miembros análogos como la clásica pareja en que cada hablante, por turno, trae a colación a la progenitora del otro, o como cuando se profiere una ofensa nominal o adjetiva y se contesta que “más (sustantivo/adjetivo) será(s) tú/ tu (ser querido)”. En ocasiones una pareja de agravios puede dar inicio a una cadena de réplicas igualmente análogas en las que se van añadiendo progresivamente elementos
enfáticos. Casos en los que al estilo de las fuerzas policiales, como recordara Borges, todo lo que diga podrá ser utilizado en su contra.
También existe la posibilidad de no recibir respuesta alguna, dada por la comodidad de insultar a alguien en su ausencia, incluso, en ausencia de cualquier posible interlocutor. De todos los insultos este, el “monologado”, es de los que mejor ilustran la naturaleza de los actos de habla expresivos, puesto que el emisor exterioriza su actitud psicológica negativa sin otra intención comunicativa que la de autoexpresarse. Otro ejemplo no menos propicio, es el del autoinsulto, donde el hablante se elige a sí mismo como recipiente del insulto.

Una posible tipología del insulto debería registrar entre los tipos más productivos aquellas ofensas que asignan calificativos negativos al referente por medio de sustantivos, adjetivos, o lexías. Este grupo daría lugar a una serie de subgrupos entre los que entrarían, por ejemplo, las ofensas relativas a la escasez de inteligencia o de salud mental, las que tienen que ver con conductas ético-morales socialmente reprobadas, entre ellas, las que sugieren que el receptor o alguna de sus personas más allegadas tienen determinadas conductas sexuales, o las que llevan implícita una comparación con animales que han devenido símbolos de comportamientos y características censurables.

Otro grupo importante sería el de aquellos insultos que proponen que el “insultado” realice determinadas acciones como que se dirija “a una localidad muy general que tiene varios nombres” (Borges, 173), o que cambie su actividad en el momento del agravio por alguna de las acciones que solo se ejecutan en privado o en pareja.

También estaría como muy productivo el grupo de insultos en forma de “declaración de que el hablante realiza determinadas acciones nefandas” (Milián, 28) sobre el oyente o algún familiar cercano de este. Muy revelador de la cultura de los hablantes, resultaría un estudio de las marcas ideológicas de los insultos más comunes dentro de este último grupo. Por ejemplo, en una cultura como la nuestra no es casual que “Dios” y la
madre del interlocutor se cuenten entre los más usuales pacientes sobre los cuales recae la acción del verbo.
Otro curioso elemento ideológico del insulto es que un mismo contenido proposicional puede constituir una ofensa para algunos hablantes y para otros no. En casos extremos, la misma frase lo mismo puede ser recepcionada como un agravio o como un elogio.

Siempre lo negativo del insulto como acto de habla y la propia transitividad del discurso, darán lugar a una especial creatividad, incluso, superproducción, aunque el escrupuloso sistema solo recoja una reducida lista de tan coloridas unidades. En cualquier caso, “... ya las recetas callejeras del oprobio ofrecen una ilustrativa maquette de lo que puede ser la polémica. “ (Borges, 173)... o de lo que no podrá ser la polémica, a falta de estudiosos dispuestos a analizar el insulto sin embarazo, o por el caos que pudiera significar un posible exceso de informantes.

تبين محاولات "المختارات الأدبية" الحثيثة التبسيطية ببعض الأحجام، من جديد، بأن الدراسات اللغوية قد انشغلت، بشكل غير محدود، ببعض مظاهر اللغة.
 
 الطرح العلمي اللغوي الزائف ببعض الكتب، والاتجاه المغازل للمحظورات - والذي لا يفقد مشروعيته، عندما يتسم بالصراحة والوضوح -، تُشير إلى العمل الرسمي الضئيل المنجز في هذا المضمار.
 
 توجب على أحد ما نسيان أنّ الشتم، هو عبارة عن "إهانة شخص والتسبب بإثارته عبر استخدام كلمات أو أفعال" (وفق القاموس الملكي الأكاديمي الإسباني، 1970) (وضعنا خطّ تحت الكلمات)، أو أن الشتم اللفظي، ربما هو الشتم بامتياز، ليس أقل من فعل كلام مكافيء لأفعال كلام أخرى، ويملك أهمية خاصة بينها، بسبب تجاوزه "لما هو صحيح" وإنتهاكه للكثير من الثوابت.

الشتيمة، كذلك، أحد أفعال الكلام التعبيرية "حالة نفسية للمتكلم، سببها تغير في العالم الذي يعيش فيه المحاور أو المتكلم ذاته" (هافيركات، 1993)، في هذه الحالة، هي حالة نفسية سلبية. 
 
وكما هو الحال مع الإعتذار، الناشيء عن وضع سلبي، المتأثِّر هو المتكلم فقط. يمكن أن ينشأ هذا الوضع بشكل مقصود أو لا من قبل المحاور - أو ما هو ذات الشيء، من يتلقى الشتيمة - كما يحدث في حالة إنجاز العمل أو إتمام الوعد. 
 
بكلمات أخرى، في وضع سابق لغوي أو لا، يعتبر أحد ما (بشكل عادل أو لا) المتسبب عمدا أو لا عن وضع سلبي لأحد، من جانبه، سيحاول إقرار التوازن من خلال تحويل نفسه إلى "شتّام". 
 
لن يتمكن المتكلم، هكذا، من التعبير بصيغة ما عن شخصيته فقط، بل سيسبب ظهور هياج مشابه لدى المحاور أيضاً.

تخلق مجموعة "فن الشتم" شتائم ذات طبيعة مختلفة. 
 
بعضها، وكما رأينا ما يحدث مع كثير من التحيات، يعمل وفق مصطلحات قيمة لا معنى، ففعاليتها عالية كإهانات، لا تنقلنا إلى وضع ممكن في الواقع ولا توفر أي توصيف للعالم خارج اللغة. 
 
في المقابل، شتائم أخرى ذات محتوى اقتراحي محدد يمكن الخلط بينها وبين تقييمات سلبية شديدة للغاية (يحدث ذات الأمر مع إنجاز العمل أو إتمام الوعد، حيث يجري الخلط بينه وبين التقييم الإيجابي). 
 
لاحظوا، مع ذلك، بأن الشتيمة يجب أن تتضمن جرعة من الخطأ، أو على الأقل، شحنة من الغضب الهائل، لأنه، ووفق الحكمة الشعبية البديهية، "الحقيقة، لا تُسيء لأحد". 
 
كذلك، يجب على الشتيمة، كفعل كلام تعبيري ذو مظهر تقييمي، أن تبدو سيئة الطابع أو مُنخفضة الجودة.

تبدو الشتيمة سلبية دوماً. 
 
لكن، هناك أشخاص شتّامين أكثر من أشخاص آخرين، في كل حال، على نحو عادل أو لا، فهناك مواقف قد تؤدي إلى تبرير الشتيمة، حيث تستوفي الشتيمة هذا الأمر أحياناً وأحيانا لا. 
 
غنيٌّ عن القول بأنّ الشتيمة تنقض دوماً مبدأ التهذيب (الكرم، التوافق، التواضع، الاتفاق والتضامن)، باستثناء إنهائها للمحادثة، يمكن أن تملك الشتيمة أفعال كلام تنفيذية ذات طبيعة متنوعة. ربما، الأجوبة الأكثر انتشاراً هي غير لفظية (الصفعات واللكمات)، الشجب (عندما تُعبِّر الضحية (أنثى أو ذكر) عن سوء معاملة المُحاور، الذي يرتكب إساءة بحقها أو يعنفها)، التهديد بأفعال كلام آتية أو بأفعال غير لفظية، رد الصاع صاعين، أي الرد بتوجيه شتيمة أخرى.

في حالة الإجابات اللفظية السيئة، نرى أنه، في بعض الأحيان، تُخلَقُ أزواج من القياسات المتماثلة، كالثنائية التقليدية، التي يتبادل المتحدث والمتلقي الشتيمة التي تستهدف الأبوين من خلالها؛ أو عندما يجري التحقير الإسمي أو التوصيفي وتتم الإجابة بأنت أكثر أو (شخص عزيز عليك) أكثر. في بعض الأحيان، تعطي الشتيمة المجال لظهور سلسلة من الردود الشتائمية التي يضاف لها عناصر أخرى تدريجياً. 

 
حالات، تُشبِه النمط الذي تستخدمه قوى الشرطة، كما يذكر بورخيس، كل ما تقوله يمكن أن يُستخدَم ضدك.

كذلك، هناك إمكانية عدم تلقي إجابة، كحالة شتم شخص في غيابه، أو حتى في غياب أيّ محاور ممكن. بين كل هذه الشتائم "المونولوجية"، يرد ما يوضح بشكل جلي طبيعة أفعال الكلام التعبيرية، حيث يفرغ المتحدث شحنته النفسية السلبية دون وجود أيّة نية تواصلية، بل من خلال تعبير ذاتيّ. 
 
وهناك مثل آخر لا يقل أهمية، هو الشتم الذاتي، حيث يختار المتحدث نفسه، كي يتلقى الشتيمة.

ثمة تصنيف للشتائم، يجب تسجيله بين الأنواع السائدة أكثر، بين تلك التعنيفية التي تطال التوصيفات السلبية الخاصة بالأسماء والصفات أو صيغ كلمات أخرى. 
 
وستعطي هذه المجموعة سلسلة من المجموعات الفرعية التي يدخل في سياقها، على سبيل المثال، الإهانات المرتبطة بقلة الذكاء أو السلامة الذهنية، والتي ترتبط بالسلوكيات الأخلاقية المرفوضة إجتماعياً، بما في ذلك ما يشير إلى امتلاك المتلقي أو أحد القريبين منه مسلكية جنسية معينة، أو محاولة مقارنته بحيوانات كرمزية للمسلكيات والمزايا المُشتكى منها.

توجد مجموعة هامة أخرى من الشتائم التي توحي "للمشتوم" القيام بأفعال محددة كما لو أنه يتوجه إلى "هيئة عامة لها عدة أسماء" (بورخيس، 173)، أو أن يغير نشاطه لحظة الشتم عبر أحد الأفعال، التي يمكن القيام بها بشكل شخصي أو على مستوى شريكين.

كذلك، تحضر مجموعة الشتائم على شكل "تصريح ينفذ المتكلم عبره أفعال شائنة" (ميليان، 28) ويجري توجيهها للمستمع أو لأحد أقاربه القريبين. 
 
يبرز هذا من خلال ثقافة المتحدثين، ويبين العلامات الإيديولوجية للشتائم الأكثر انتشاراً في هذه المجموعة الأخيرة. 
 
على سبيل المثال، في ثقافة كثقافتنا، ليس صدفة أن يحضر "الله" والأمّ ضمن أكثر الجهات الموجهة لها الشتائم أو أفعال الكلام.

ثمّة سمة فكرية مثيرة في الشتيمة، تتمثل بأن محتوى هذه الشتيمة، قد يهين مجموعة من المتلقين أكثر من غيرهم؛ أو قد لا تثير تلك الشتيمة أيّة إهانة لديهم. 
 
في حالات متطرفة، يمكن تلقي العبارة ذاتها على سبيل الإهانة أو الإطراء.
 
تعطي، سلبية الشتيمة بوصفها فعل كلام وعبورها الخطاب، المجال لظهور نوع خاص من الإبداع، بل إفراط بالإنتاج حتى، رغم إحتواء النظام المُتأثِِّّم لقائمة مختزلة من الوحدات الملونة.
 
 بكل حال، "توفّر أزقة الحي البنية الشتائمية، التي يمكن أن تُثير الكثير من الجدل" (بورخيس، 173) أو ما قد يشكل الإثارة للجدل، في غياب أخصائيين جاهزين لتحليل الشتائم، بغض النظر عن الفوضى الممكن حضورها إزاء عدد هائل من المزودين بالمعلومة في هذا الإطار.

  المراجع

Austin, J. L. How to Do Things with Words. Oxford: Clarendon Press, 1962.
Borges, Jorge Luis: Páginas escogidas. Casa de las Américas, Habana, 1999.
Curbeira Cancela, Ana: “Aproximación al discurso” (inédito).
Grice, H. P. Logic and Conversation. Cole, P. And J. Morgan (Eds.), 1975.

Further Notes on Logic and Conversation. Cole, P. (Ed.), 1978.

Haverkate, Henk: “Acerca de los actos de habla expresivos y comisivos en español” en Haverkate, Henk et al: Aproximaciones pragmalinguísticas al español. Editorial Rodopi, Amsterdan, 1993.
Leech, G. N. Principles of Pragmatics, Londres: Longman, 1983.

Milián José Antonio: “Y yo en la tuya... El insulto y el genio de las lenguas” en Revista de Libros No 25. España, 1999.
Searle, J. Speech Acts. Cambridge, C.U.P., 1969.
 
 
قد يهمكم الإطلاع على مواضيع ذات صلة


 

ليست هناك تعليقات: